Vivimos rodeados de radiaciones que emiten aparatos que utilizamos diariamente como el microondas, el televisor, el teléfono celular y hasta el sol.
Todas ellas, en grandes cantidades, pueden perjudicar nuestro organismo y causar alteraciones. La clave para evitar este tipo de efectos nocivos en nuestra salud es evitar las largas exposiciones a estas radiaciones. 

Las electromagnéticas, por el actual desarrollo de la tecnología son las que más están presentes en nuestra vida diaria. La pantalla de la computadora, de los televisores, celulares y enchufes. Nuestro entono habitual en la mayoría de puestos de trabajo incluye uno o varios de estos aparatos que liberan radiaciones, cuyos efectos han sido estudiados, se ha llegado a la conclusión de que la exposición excesiva ante estas radiaciones causa cansancio, fatiga y dificultad para dormir.

Para evitar esto, se recomienda tener atmosferas más ventiladas, alejar las fuentes de radiaciones electromagnéticas o sustituir los monitores de tubos por las pantallas planas.

El teléfono móvil es uno de los apartaos más controvertidos, aun que  todavía se están estudiando muchos de sus efectos, esta comprobado que en el caso de los grandes usuarios con grandes exposiciones, pueden producir el llamado neuroma acústico. Se trata de un tipo de cáncer del nervio auditivo que suele presentarse en profesionales con mucho uso del teléfono móvil.

Para combatir estos efectos, expertos proponen no hablar por celular cuando este tenga poca cobertura, ya que el este emite mayor radiación para lograr captar la señal de sus antenas.
Además, es aconsejable que no se transporte cerca a los órganos vitales como el corazón, ni en los bolsillos del pantalón, como ocurre con los hombres que lo llevan cerca a sus genitales.

Así que ya lo saben, comencemos a tomar medidas en el asunto para que un día no suframos las consecuencias.

Para Hoy Michoacán, Sarai Cahue.